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Safari es un navegador para iOS que ahora está disponible para Android. Tiene la mayoría de las características del original y funciona de la misma manera. Tienes el modo oscuro, la navegación privada y otras opciones menores. La velocidad sigue ahí casi sin tiempos de carga entre páginas.
En cuanto a la seguridad, no hay forma de saber si conserva el nivel de protección de iOS. Los ajustes son muy limitados. Tienes la configuración básica como la gestión de cookies e historial. Nada que tu Firefox o Chrome no puedan hacer ya. No hay utilidades especiales que te inciten a reemplazar el predeterminado.
Velocidad del rayo
Lo mejor de Safari es su velocidad. Es la velocidad del rayo. Se puede decir que rivaliza incluso con Chrome en cuanto a tiempo de carga. El tiempo de descarga también es genial, pero no tan rápido como la versión de iOS. El cambio entre páginas y pestañas es perfecto.
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La interfaz es muy limpia y fácil de usar. Usted no tiene que muchas opciones de ajuste para elegir, pero, de nuevo, ese es el punto. El diseño es para mantener las cosas tan simples como sea posible. Puede que se hayan dejado llevar por la simplicidad. La versión de Android no conserva la sofisticación de su homóloga de iOS.
Demasiadas pocas opciones hacen que toda la aplicación parezca vacía y anticuada.
No utiliza muchos recursos
Safari viene en un tamaño pequeño, lo que tiene sentido, teniendo en cuenta que no tiene ningún plugin. Utiliza menos datos que los principales navegadores de Android como Firefox e Internet Explorer. La aplicación también es indulgente con tu memoria RAM. Así que puedes ejecutar más programas junto a ella, sin problema. Tener varias pestañas tampoco ralentiza su proceso.
Todas las pestañas están interconectadas
No hay indicios de que Safari proteja a los usuarios de Android de la recopilación de datos o de sitios maliciosos. No maneja cada pestaña como una instancia independiente como Chrome. Esto significa que si una pestaña se bloquea, también lo hacen las demás. Eso dice bastante sobre la falta de seguridad. Tampoco tienes la opción de restaurar la sesión anterior después de una caída.
Aparte del Modo Oscuro incorporado, este navegador no ofrece ninguna otra extensión. Puedes seguir sincronizando tu cuenta de Google, pero no arrastraría los complementos que tuvieras. Tendrás que usar plugins específicos para Safari, y no hay muchos para esta versión.
Rápido pero no seguro
La aplicación tiene buenas cualidades en general y es fiable cuando se trata de la velocidad. Por desgracia, hasta ahí llegan sus ventajas. Si todo lo que haces es navegar por Internet, Safari es el camino a seguir.
Para tareas más delicadas, quédate con tu navegador por defecto. No hay nada que este navegador ofrezca que tu principal no haga ya. Tampoco conserva el nivel de protección que tiene la versión de iOS. No hay garantía de que estés seguro como dice.
