Antiguo Egipto - Una historia de mitos, religión y arquitectura
El título de Entre los dioses es una referencia a la creencia cristiana de que Jesús nació en Belén, y que María y José nacieron en Nazaret. Esto fue cambiado en la historia cuando se le dijo a José que Jesús había nacido en Nazaret. Los romanos tuvieron muchas dificultades con la religión, principalmente por su rechazo a la religión estatal romana como forma de vida. A pesar de ello, tampoco les gustaba el hecho de que Jesús fuera crucificado, lo que le llevó a escribir su evangelio en griego, en lugar de hablar en hebreo. Por ello, el lugar donde se escribió su último evangelio se llamó "Entre los dioses". Según el folclore popular, esto se debió a que la hija del rey Herodes buscaba al niño Jesús, que había nacido en Nazaret y había estado escondido allí durante tres años.
El sol y la luna para marcar el cielo oriental y los signos del zodiaco, mientras que la Vía Láctea marca el cielo occidental y es perpendicular al sol. La ubicación de la Vía Láctea a lo largo de la eclíptica es la razón por la que el nombre "Ameno", significa "el amanecer". El cielo occidental se conoce generalmente como "Nimbus", y el cielo del sur como "Cetus". La Vía Láctea nunca ha estado exactamente alineada, sino que cambia por grados cada año, ya que la luna tarda unos cuatro días en moverse a través de los cielos.
El nombre del libro, Entre los dioses, está tomado del libro de los Hechos del Nuevo Testamento cristiano, en el que, entre otras cosas, se dice que Jesús nació entre los hijos de Entre los dioses. Algunos creen que el nombre significaba en realidad "Amén a los Dioses", o tal vez "Amén al Hombre de Fe". El concepto de Entre los Dioses fue tomado de los egipcios, que creían que el sol se movía por el cielo a una velocidad fija, al igual que el sol alrededor de la tierra. Por eso utilizaban el símbolo de un ojo para significar el sol. La traducción al inglés británico se traduce literalmente como "junto al sol".