Reseña de la última película de Disney: Los Goonies
Si te gusta buscar vídeos que enseñen a los niños a dibujar, verás que una de tus mejores opciones es la serie de películas Chicken Little. Seguro que recuerdas haberla visto de pequeño: Disney Channel ha reeditado este clásico en forma de serie protagonizada por Mike Caren y Tim Burton. La película original se proyectó en los cines en 1998, y es un bonito viaje nostálgico por el carril de la memoria para muchos niños. Aquí tienes una reseña de la nueva versión, titulada simplemente "Los Goonies". Que la disfruten.
15 años después del primer estreno de su película de animación, Disney lanzó otro largometraje llamado Los Goonies. Esta vez, el estudio se dirigió a niños de seis años en adelante, en lugar de a niños de cinco o menos. En esta ocasión, tuvieron éxito. En esta película, los Goonies son una red subterránea de pingüinos que viven en un reino subterráneo llamado el Reino de las Solteronas. Allí, se dedican a hacer lo que hacen los pingüinos, lo que incluye... lo has adivinado... caerse en la enorme piscina llamada Squidoo.
Un día, Donald y sus amigos Abby y Fru decidirán intentar correr hacia un gran agujero azul llamado Baby Hole. Después de que les digan que sólo los seres malvados caen en el agujero (lo que realmente no es cierto), se embarcan en una gran aventura para descubrir si sus amigos pueden caer en el agujero. Lo más divertido de este episodio es cuando se encuentran con su primer enano (un bebé que es básicamente una gallina) y lo siguen hasta su casa. Una vez que lo hacen, conocen a su nuevo amigo, Bob Esponja Squarepants, y éste les presenta. A partir de ahí, las cosas despegan rápidamente y van de bebé a dinosaurio en busca del mayor tesoro jamás conocido por la humanidad... los Goonies. Si te encantaron los Goonies, entonces te encantará este largometraje de animación, que es tan bueno como el original.